Con mucho cariño, porque la quiero mucho, por su cumpleaños en diciembre pasado, le regalé esta agenda feminista a una amiga. Por si a alguien le puede servir o la quiere imprimir y encuadernar. Pinchando sobre la imagen, se puede ver y descargar
Hace 50 años que se echa de menos la voz de la poeta única, singularísima, que fue Alejandra Pizarnik. Nació en Buenos Aires, en 1936, en una familia de inmigrantes y desde muy niña sus pasiones fueron leer, escribir, escandalizar un poco... Comenzó estudios de Filosofía y Letras que no acabó, tomó clases de pintura, leyó desaforadamente, viajó, volvió… y siempre escribió poesía, narraciones y diarios de donde se han extraído la mayor parte de las entradas de este diccionario, que intenta recomponer algunos fragmentos de ese puzle llamado Alejandra Pizarnik.
Sonja Graf fue una pionera en ganar espacios para las mujeres en ámbitos que se les suponía vedados, tanto en el círculo del ajedrez como en terrenos sociales.
Nacida en Moldavia en 1995, Duca lleva desde los 12 años en el mundo del arte y su trabajo ha sido reconocido por su uso del color y la abstracción explícita y latente de sus pinturas. Sus obras son tan delicadas como certeras y fuerzan al espectador a desnudarse, a verse reflejado en esa escena que tantas veces se repite en la intimidad donde creemos que nadie nos ve.
Un fotolibro muestra cómo la fotografía puede convertirse en una herramienta de empoderamiento para las mujeres internas en centros penitenciarios.
No es ningún secreto que la sociedad puede llegar a ser muy dura con las madres. Las expectativas que pone sobre nosotras son tan altas, que además de sentirnos culpables por creer que no estamos haciendo las cosas bien, constantemente somos criticadas y señaladas. En cambio, con los padres, es otra historia.
Cuando se habla de Marinaleda, ese pueblecito que no llega a los 3000 habitantes de la comarca de la Sierra sur sevillana, pronto nos viene a la cabeza nombres como el de Juan Manuel Sánchez Gordillo, «el alcalde barbudo» que ya todas conocemos. En cambio, poca gente cae en la importancia que tuvieron las mujeres, con sus cuidados, a la hora de convertir aquella utopía en realidad.